PIM PAM, PIM PAM

Ayer corrí mi primer cross de la temporada y mi hija su primera carrera.

La lesión del pie la llevo regular, no estoy restablecido del todo, pero ya sabemos como somos de cabezones los que nos gusta el deporte.

El cross en cuestión fue en Utebo, era un circuito de 970 metros al que había que dar 5 vueltas. Después de estar una semana prácticamente parado, llegué a esta carrera para pasarlo bien y disfrutar. Esta era mi segunda carrera en una distancia de 5.000 metros o similar y recuerdo que tenía una marca de 19 minutos. Siendo realista quería hacer un tiempo similar.
Salí un poco fuerte, la primera vuelta me salió en 3:30, muy rápido para mi estado de forma actual. Las 3 restantes las hice a 3:42 y adelantando a corredores. En estas vueltas iba guardando para el final y si tenía fuerzas en la última vuelta hacerla algo más rápida. Y lo conseguí, me salió en 3:24 y terminando con fuerzas. Al final un tiempo de 18':00'', contento muy contento.

Pero lo mejor había pasado un poco antes de que yo corriera, el ver a mi hija corriendo en una carrera, con su dorsal y todo, me lleno de satisfacción. El verla riendo toda la prueba, eran 140 m, fue una gozada que no tiene precio, de veras que fue fantástico.

Me quedo con este detalle, lo demás queda en un segundo plano.